Del 21 al 23 de septiembre ICOM Alemania e ICOM Norte (ICOM Islandia, Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca) organizaron en Helsingborg (Suecia) una conferencia conjunta. Siguiendo con el espíritu del Día Internacional de los Museos 2017, “Museos e historias controvertidas: Decir lo indecible en los museos”, los participantes abordaron aquellos “asuntos difíciles” que surgen en todos los aspectos relacionados con el trabajo museístico.
Quedó demostrado que el tema elegido es de gran relevancia en estos tiempos, pues muchos se vieron rápidamente identificados con las situaciones analizadas durante la conferencia y expresaron la necesidad de intercambiar y desarrollar estrategias comunes para abordar esas historias que resultan difíciles. Una de las primeras palabras clave mencionadas fue “malestar”, una sensación inevitable que sienten los profesionales de los museos y los visitantes cuando se enfrentan a casos difíciles. La recopilación de este tipo de conversaciones resulta imposible si no se promueve una relación de confianza con las personas implicadas, lo que añade una dimensión emocional a la hora de abordar estos objetos e historias. La estrecha relación entre la forma en que los museos abordan temas difíciles y su libertad política estuvo presente en varias de las presentaciones, así como temas difíciles relacionados con el género, la ética o las responsabilidades públicas de los museos.
Un reto para el presente
Al igual que interpretar y recordar un pasado doloroso es una tarea difícil, también lo es recopilar y mostrar el presente. Este tema fue planteado por la Presidenta del ICOM, Suay Aksoy, durante su discurso de apertura. La Presidenta comentó: “La reconciliación aparece como una acción postraumática que solo se da después de varias décadas. Preparar a las comunidades para la reconciliación lleva tiempo. Por eso, cuanto antes se comience a trabajar en esta línea, más pronto se instaurará la paz. Esto justifica la pregunta de si no podemos hacer algo mientras las cosas se están gestando, cuando están sucediendo. O ¿por qué los museos pueden hablar sobre el trauma solo después de varias décadas de que haya ocurrido?, ¿es la era en la que vivimos demasiado rápida para los museos?, ¿es posible que sea necesario actualizar el formato de nuestras estructuras y su modo de operar? Pero, entonces… ¿hasta qué punto se trata de algo relevante para los museos, hasta qué punto contribuye a la relevancia de los museos?”.
Es posible que estas preguntas no tengan todavía una respuesta definitiva, pero la conferencia ha sido un gran paso hacia el fomento de conversaciones sobre la necesidad de los museos de abordar lo indecible e implicarse activamente con las comunidades a las que dan servicio para dar visibilidad y voz a aquellas historias que más difíciles resultan.