Los museos no tienen fronteras,
tienen una red

Florencia Croizet

Lic. en museología y gestora cultural- Museo Evita, Buenos Aires, Argentina

Palabras clave: Museos; Virtualidad; Colecciones; Industrias culturales; Relatos contrahegemónicos. 

Desde hace décadas, debido a diversos fenómenos propios del desarrollo humano y ajenos a éste, los cimientos sobre los cuales la institución-museo se ha erigido han entrado en crisis; desafiando la prosperidad de las gestiones de dichas instituciones culturales.

Caída de los cimientos modernistas

Uno de los grandes pilares que ha empezado a tambalear hace años son los denominados metarrelatos modernistas a partir de los cuales los museos han conformado sus colecciones y diseñado sus discursos expositivos.  Así, bajo una perspectiva blanca, burguesa, eurocentrista y hetero-patriarcal, disfrazada de neutralidad científica, se ha desestimado patrimonializar las historias y memorias de grupos subalternos que no cuadraban con el sector que detentaba la hegemonía simbólica. Sin embargo, este marco teórico comienza a desmoronarse por frentes externos (movimientos sociales de grupos relegados que pugnan por la consolidación de derechos) e internos (la irrupción de la museología social y la museología crítica). Ante este nuevo panorama, los tradicionales discursos museísticos se perfilan como arcaicos, dejando al descubierto su claro sesgo elitista, el cual negó el resguardo y difusión del patrimonio de los grupos que ahora alzan su voz. Si el museo pretende ejercer su rol social en el marco de una sociedad que lucha por ser más equitativa y pluralista (batallas encarnadas, en general, por jóvenes generaciones), tendrá necesariamente que rever sus políticas de acopio y construcción de relatos, democratizando en verdad su sistema de representatividad.

Exposición Ser mujeres en la Esma. Buenos Aires, Argentina. En 2019, por primera vez se narraron las vivencias de las mujeres detenidas en el ex centro clandestino de detención, que función durante la última dictadura cívico-militar argentina. Hoy, sitio de memoria. ©Museo Sitio de Memoria ESMA

El museo ante la convergencia digital

La cuarta revolución tecnológica ha provocado una crisis sin antecedentes respecto de otro de los pilares angulares del museo: la materialidad física de las colecciones. Los museos han gestionado su funcionamiento alrededor de la prevalencia del aura de objetos y obras de arte que resguardan. La nueva era tecnológica signada por la convergencia digital de las industrias culturales, la inteligencia artificial, la irrupción de los denominados prosumidores, la prevalencia de los metadatos, entre otras, golpea de lleno la inercia con las que muchos museos se han desempeñado. La velocidad en la que irrumpen nuevos avances tecnológicas es cada vez mayor. Por ello, se torna necesario que los museos puedan diseñar estrategias que permitan al sector patrimonial continuar sirviendo a una sociedad que ya adoptó dichas innovaciones y no dudará en incorporar los que surgieren. De no hacerlo, habrá un abismo entre un modelo museal arcaico y los (ya no tan) nuevos hábitos de comunicación y consumos culturales.

Juego ¡A cocinar con Catalina! creado por la Estancia Jesuítica Alta Gracia, Argentina. © Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers

Agregar valor a la sociedad

Otro sustento que ha comenzado a desmitificarse ha sido la preferencia por el funcionamiento aislado y unilateral. En un mundo que pugna por el trabajo colaborativo, por acuerdos win-win y por alianzas estratégicas que conlleven a la creación de sinergias, el museo no puede continuar trabajando de manera solitaria: asociaciones reales y duraderas con otros actores, que propicien la oferta de servicios y productos museísticos que agregan valor en diversos campos (educación, medio ambiente, economía) se tornan esenciales. La generación de fondos ha sido siempre un eje de gestión problemática para las instituciones culturales, tanto sean públicas como privadas. Sostener museos se ha tornado una erogación costosa en un mundo donde las industrias creativas han incursionado en modelos de producción y distribución más económicos, ligados a la virtualización de contenidos.

Por lo tanto, sabiendo que el financiamiento de instituciones estáticas, aisladas y poco permeables a las innovaciones tecnológicas ha disminuido de manera considerable, sumado a la crisis del Covid-19 que dejó sin ingresos a quienes habían logrado posicionarse como atractivos turísticos, se torna imprescindible que los museos abandonen su zona de confort para generar proyectos innovadores, mediante alianzas inspiradoras, atractivas para lograr alcanzar los ingresos presupuestados. Es decir, la escisión entre el binomio arte-cultura y economía no puede continuar en la mentalidad de quienes gestionan museos si está entre sus objetivos la vehiculizaciòn de sus proyectos.

Los principios que han forjado históricamente a la institución-museo han entrado en crisis, vaticinando un posible ocaso. Los discursos modernistas, la prevalencia de las colecciones físicas y el funcionamiento aislado y unidireccional de los museos están siendo desafiados por la nueva coyuntura tecno-social. Quienes sepan leerla, podrán proyectar escenarios poco favorables para instituciones cerradas y solitarias, poco permeables a los cambios. En este sentido, quienes entiendan que en toda crisis surgen nuevas oportunidades, diseñarán estrategias para sortear las primeras instancias de incertidumbre para luego desarrollar planes que conduzcan a gestiones más eficientes.

Es decir, instituciones que se permitan intercambiar know-how con otros sectores de la economía creativa, pluralicen realmente sus relatos y se preparen para ofertar propuestas innovadoras, propias de la era de la convergencia digital.

Un museo inteligente es una institución que, debido a su permeabilidad y capacidad de adaptación a nuevos desafíos, continúa ejerciendo su misión de resguardo y divulgación patrimonial, sin abandonar sus objetivos sociales.

Referencias y recursos

Chagas, M. & Gouveia, I. 2014. Museologia social: reflexoes e praticas (à guisa de apresentação), Cadernos do CEOM, Vol. 27, n°41, pp. 9-22

Croizet, F. 2021. LGBTQI+ Representation in the Museum Ecosystem of Buenos Aires, Museum International, Vol. 72, n° 287-288, Routledge/Taylor and Francis, pp. 94-103

Igarza, R. 2012. Internet en transición. Secretaria de Cultura de la Nación, A la búsqueda de un nuevo estatuto para la cultura digital, En la ruta digital. Cultura, convergencia tecnológica y acceso, Buenos Aires, Argentina, pp.150-162

Montpetit, R. 2000. Les musées : générateurs d’un patrimoine pour aujourd’hui, Ministère de la Culture et de la communication. Recuperado de: https://www.mcc.gouv.qc.ca/publications/montpetit.pdf

Exposición Ser mujeres en la Esma. Museo Sitio de Memoria ESMA, Buenos Aires, Argentina: http://www.museositioesma.gob.ar/item/ser-mujeres-en-la-esma/

Juego ¡A cocinar con Catalina! creado por el Museo Nacional Estancia Jesuítica de Alta Gracia y Casa del Virrey Liniers, Argentina:https://es.educaplay.com/recursos-educativos/5673009-a_cocinar_con_catalina.html